“Hay más de 400 familias que están en luto hoy y eso es solo porque no tenemos instituciones fuertes. Aquí no hay quien regule, aquí no hay quien vele”, fueron las palabras de Micaías Pérez, hermano de Rubby Pérez, previo al entierro del merenguero en el cementerio Puerta del Cielo.
«Es lamentable lo que está ocurriendo, pero también es una advertencia. Esto que sucedió le pudo haber pasado, y creo que va a seguir pasando.Hay que crear instituciones fuertes… los políticos pasan, las promesas pasan y si no tenemos instituciones fuertes, no va a haber personas que regulen nuestras edificaciones y seguro que eso va a volver a pasar”, manifestó el médico ante las decenas de personas que le daban el último adiós a “la voz más lata del merengue”.
Micaías se refirió al desplome del techo de la discoteca Jet Set, hecho que cobró la vida 221 personas y dejó decenas de heridos.
“Lamentamos que hoy tenemos una sociedad de luto, una sociedad que está llorando literalmente. Hay más de 400 familias que están en luto hoy y eso es solo porque no tenemos instituciones fuertes, aquí no hay quien regule, aquí no hay quien vele”, dijo.
Pérez murió la madrugada del marte 8 de abril mientras amenizaba la fiesta en el reconocido centro diversión de esta capital. Su cuerpo fue recuperado de los escombros la madrugada del día siguiente.
Los restos del cantante fueron expuestos el miércoles en un funeral privado en la funeraria Blandino y este jueves fue trasladado al Teatro Nacional, donde el público en general pudo despedirse del ídolo del merengue.
Durante el transcurso de la mañana, su hija y corista de la orquesta, Zulinka Pérez, interpretó la última canción “Color de Rosa”, que cantaba su padre al momento de morir. También en medio del dolor interpretó “Cuando se ama” de Laura Pausini. De igual manera, sus hermanos Micaías y Lidia Pérez entonaron una alabanza cristiana. A Rubby le sobreviven siete hijos.